viernes, diciembre 30, 2011

¿Nos gobiernan idiotas, o simplemente gente sin escrúpulos?


Con el fin de año, me había propuesto poner en orden los hechos que definen el tablero económico en el que tendremos que vernos el año que viene. Confieso que el título de la entrada en el blog era mucho más neutro inicialmente, pero es que el más mínimo análisis nos lleva a la conclusión de que solo los economístas y gobernantes más estúpidos o sinverguenzas pueden defender las políticas económicas que nos han traido hasta aquí y que nos condenan a un año que viene realmente catastrófico.

A grandes rasgos la situación económica puede resumirse como sigue:

En España estamos en records de desempleo, con un sector de la construcción en mínimos, con créditos hipotecarios en descenso y con un enorme stock de vivienda sin vender. Estamos también en records de impagos bancarios y con un nivel de endeudamiento privado inmenso, si bien nuestra deuda pública es todavía relativamente baja comparado con otros países del entorno. Los tipos de interés se encuentran en la banda baja y la economía se encuentra extraoficialmente en recesión.

Si miramos a nuestro alrededor, la situación no es tampoco boyante. Se espera decrecimiento económico en buena parte de nuestros socios europeos. Igual situación tendrá Japón y quizás EEUU, mientras que los BRIC esperan crecimientos moderados, con China (y Australia) sufriendo su propia versión de la burbuja inmobiliaria como riesgo en el corto plazo. Incluso con la demanda tan debil, los precios del petroleo se encuentran en torno a los 100 USD, y la creciente inestabilidad en oriente medio y en la zona del golfo pende como una amenaza más.

A estas circunstancias tan calamitosas asistimos con el cargador de medidas económicas habituales ya gastado. Los tipos de interes oficiales se han bajado por parte de los bancos centrales hasta mínimos históricos y el nivel de endeudamiento público se ha duplicado prácticamente desde el inicio de la crisis (si bien se ha gastado mucho más en rescatar que en fomentar la demanda y el consumo).

En los últimos dos años, ante la debil respuesta a las medidas más keynesianas y el miedo al exceso de déficit, los elementos más ultraliberales han recuperado el control de la economía con sus recetas más salvajes. Hemos acometido recortes de todo tipo, empeorando condiciones laborales, retrasando jubilaciones y rebajando salarios de funcionarios como medidas más espectaculares. El resultado ha sido pasar de un crecimiento raquítico a una nueva recesión. Estamos de vuelta al 2008, pero mucho peor y los augurios no pueden ser peores para el año que entra.

Ante estas circunstancias se nos receta más ajustes. La teoría es que de esta manera se gana en competitividad de forma que sea el sector exterior el que tire de la economía. Si la medida es más que discutible a nivel de una sola nación, resulta estúpida recetada conjuntamente a todas las naciones a la vez, en un juego de suma cero en el que lo que uno gane lo pierde otro. Es ridículo, incluso en el caso hipotético de que arrastraramos nuestras ya mermadas condiciones sociales a la altura del tercer mundo, no vamos a encontrar quién compre nuestros productos con la demanda mundial en caída libre. ¿Es quizás por eso por lo que nos afanamos en buscar planetas extrasolares susceptibles de albergar vida (y compradores)?

Ahora la pregunta es, ¿son nuestros gobernantes estúpidos? ¿Como es que no se dan cuenta si es tan obvio? La respuesta me parece relativamente sencilla, y es que las medidas económicas suicidas que se están tomando quizás no funcionen, pero garantizan el mantenimiento de los privilegios y riquezas acumuladas por las oligarquías económicas en la fase de crecimiento. Y aunque sea remota la posibilidad, ¿quién asegura que no se podrá volver a poner en marcha una economía de burbuja como la que sustentó el crecimiento anterior?

Es verdad que no parece que vaya a sonar la flauta; por que al fin y al cabo los resultados hasta ahora son desastrosos. Duplicar la dosis a ver si la cosa mejora suena estúpido, pero es que la alternativa pasaría porque se tomen medidas para eliminar la deuda acumulada por los trabajadores, y eso supone que la crisis la paguen los que amasaron fortunas en el ciclo anterior. Además habría que dar la vuelta a todas las políticas ultraliberales que desde los años 80 han permitido ese trasvase brutal de riqueza desde los trabajadores hacia los bolsillos de los más ricos. Es normal que prefieran arriesgarse a un decrecimiento pagado por los otros, antes que probar medidas que permitan una recuperación pagada por ellos.

Puestos a dar una respuesta a la pregunta que planteaba como título de la entrada, me inclino por pensar que predominan los segundos con el apoyo de un montón de los primeros.

domingo, diciembre 25, 2011

Pequeño homenaje a mis viejos profesores

Aprovechando que nos encontramos a la espera de que se desarrollen nuevos capítulos de la tormenta político-económica, y en tiempos en que nuestra hipócrita y falta de escrúpulos presidenta de la Comunidad de Madrid anda denostando y humillando a nuestros profesores, me apetecía hacer un pequeño homenaje personal a aquellos que pasaron por mi vida y contribuyeron a mi formación, y así de paso que conste como un pequeño acto de desagravio hacia toda la profesión. Personalizo en aquellos que más positivamente recuerdo de cada ciclo escolar, gente comprometida con su trabajo que moldearon lo que ahora soy y que hicieron de los estudios algo más agradable y útil. Y lo extiendo a aquellos otros que quizás no dejaron un recuerdo tan vivo, pero que supongo pusieron el mismo esfuerzo.

De mis estudios de EGB tengo un recuerdo lejano, no soy de esa gente con nítida memoria de sus años infantiles. Me resulta por tanto más dificil recordar los detalles que hicieron de Juan Luis Colino mi profesor favorito del Colegio Zurbano. Le recuerdo de tercero de EGB asociado a campeonatos de damas y también de chapas (en tableros que preparábamos en clases de trabajos manuales). De Juan Castrillo, profesor de Religión, si tengo un recuerdo más claro, por haber asistido a sus clases en los cursos de septimo y octavo de EGB. Eran finales de los 70, y se respiraba la transición política, haciendome ya militante político pro-PCE  y ateo declarado (que era lo que se llevaba en mi casa). Todo lo anterior no impedía que Juan siempre me regalara calificaciones de sobresaliente, junto con su cariño y buen trato. De él recuerdo también algunas discusiones metafísicas (supongo que de bajo nivel) que me hacían sentir bastante adulto. Buenas personas ambas que recuerdo vagamente pero que evocan sentimientos positivos en una fase escolar que no recuedo como especialmente grata.

Tengo mejores recuerdos de mi paso por el Instituto Fortuny. De un entorno de colegio privado pequeño, pasé a un entorno de instituto público grande y con bastante descontrol. Hubo asignaturas casi enteras que convertí en no presenciales y me pasé jugando al futbol con los amigos. De aquella época recuerdo con especial cariño a Francisco Azaña (Paco), que fué mi profesor de Geología en tercero de BUP. Algo bueno debió de hacer para que fuera la Geología mi primera alternativa a la hora de pasar a la universidad (una de mis primeras renuncias). Tenía una estupenda forma de controlar una desbocada clase de chavales de 16 y 17 años, apelando a una singular democracia en la que él se declaraba "mayoría" y nos declaraba a los alumnos "minoría" ("calma en la minoría" nos decía cuando quería poner orden).

Me reservo mi última mención para David Anisi, del que acabo de saber que murío en el año 2008 con solo 59 años. Fuí alumno suyo en la asignatura de Macroeconomía en la Facultad de Económicas de la Universidad Autónoma de Madrid, y de él obtuve una visión de las distintas teorías macroeconómicas como lo que realmente son, interpretaciones de una realidad compleja y cambiante realizadas a partir de una base de pensamiento político, y por tanto muy lejanas de esa verdad "científica" que se nos vende cada día para justificar la imposición de un sistema económico injusto.

Quede aquí pues expresado mi agradecimiento y respeto hacia estos y todos los demás profesores que tuvieron la suerte o desgracia de contarme entre sus alumnos.




domingo, diciembre 11, 2011

De cumbres y ajustes

Dos días desde la cumbre europea y los grandes titulares van dejando paso a un análisis más profundo de lo allí ocurrido y las consecuencias que tendrá para todos nosotros. Hay un primera evaluación de vencedores y vencidos, que se hace en función de las expectativas iniciales.

Vencido es a mi entender David Cameron, no por el hecho de quedarse fuera de la postura común, sino por su incapacidad de sumar algún otro país a sus posturas. Es en mi propia opinión la única buena noticia, dado que es el Reino Unido el gran defensor de las posturas contrarias al aumento de la regulación financiera, postura que queda inevitablemente debilitada. Tampoco se hace uno grandes ilusiones al respecto.

Hay también en mi opinión una única vencedora real, la antipática Merkel. Arranca de sus socios el acuerdo de plegarse a sus posturas de control presupuestario sin que a cambio acceda a la más mínima concesión en materia de funcionamiento del BCE o emisión de bonos conjuntos. Alemania sigue dispuesta a aprovecharse de una situación que le favorece sin ceder ni lo más mínimo.

Hay en tercer lugar un falso miembro del bando vencedor en el presidente Sarkozy. Uno tiene la impresión de que lo único que le importa es el rédito que quede para si mismo de cara a las próximas elecciones presidenciales francesas. En ese sentido, ha acomodado su postura a la alemana de forma que pueda vender como victoria algo que dudosamente es beneficioso para su país.

De los demás poco se sabe y parece que poco importa. En un ámbito local, Rajoy, hablando por boca de Zapatero, consigue un irrelevante fracaso. No ha surgido apenas ninguna medida real de apoyo a la deuda española, lo que nos deja en manos de la próxima ofensiva especuladora. La victoria de Merkel es nuestra derrota, y ni siquera puede traerse la medalla de haber dejado a España entre los países con capacidad de bloqueo en las decisiones al respecto del Fondo de Estabilidad, selecto grupo formado por Francia, Alemania e Italia. Si para los intereses de España esta no parece haber sido una reunión provechosa, Rajoy y el resto de líderes se traen sin embargo una maleta llena de excusas para poner en marcha un programa de recortes sociales sin precedentes. Preparémonos para lo que se nos viene encima que vendrá aderezado por argumentaciones de la imposibilidad de tomar otro camino diferente del marcado en la reciente reunión.

Nada nuevo por otra parte, pero aunque la mayoría de nuestros conciudadanos se mantienen en el pasmo y serán presa facil de argumentaciones falaces a la hora de ser atracados en sus derechos, no puede estar contento nuestro flamante futuro presidente del hecho de no haber conseguido ninguna contraprestación que nos suavice el mal trago. Seguimos calentando motores y colocando las fichas. La partida empezará con la toma de posesión del nuevo gobierno, y aunque las reglas estén amañadas, resulta arriesgado anticipar como se van a desarrollar los acontecimientos tanto en España como en el resto de países vecinos.

Una pena que el estar jugándonos las habichuelas nos impida disfrutar relajadamente del espectáculo político-social en el que nos vemos envueltos.

jueves, diciembre 08, 2011

¿Donde está la socialdemocracia europea?

Estamos en un tenso compás de espera tanto en España como en Europa. En los próximos días se pondrán seguramente encima de la mesa medidas sin precedentes para intentar salir del atolladero de esa crisis económica en la que llevamos inmersos desde hace ya tres años y que solo da signos de empeoramiento. Vivimos momentos históricos, y ante la gravedad de la situación uno esperaría un fuerte debate entre las distintas corrientes políticas, una calurosa discusión entre los políticos de todos el espectro. Nada más lejos de la realidad.

Tenemos a estas alturas más o menos claras las alternativas que se barajan por parte de los conservadores europeos (que engloban en España no solo al PP, sino a sus socios de las derechas localistas). Su lectura de la situación es la de que estamos en una crisis derivada del excesivo endeudamiento público y de la falta de competitividad. Su receta es la del recorte social y la restricción del gasto público, garantizando sus ganancias al capital para que recupere confianza y nos saque de la crisis vía inversión. A muchos se nos hace evidente la debilidad de este discurso que solo nos lleva al desastre, pero no podemos negar que el discurso existe, y que las recetas, equivocadas o no, se han propuesto.

Y luego tenemos matices, que es lo que realmente se discute en estos días. Por una parte está Merkel defendiendo la ortodoxia ultraliberal con un tinte nacionalista germano, proponiendo una salida de la crisis a base de devaluar salarios y costes sociales de forma que se garantice el cobro a los acreedores de las economías fuertes que prestaron a paises menos competitivos. Frente a ello, la derecha de los países del sur nos ofrece una alternativa más "solidaria", en que los recortes son los mismos, pero en el que los paises "centrales" ayudan a los "periféricos" mediante la emisión de bonos garantizados conjuntamente. En realidad la receta no varía mucho, y solo se discute el reparto nacional de los costes y esfuerzos.

Tenemos por otro lado a la izquierda "minoritaria" (IU en España y sus socios europeos de Die Linke o Le Gauche) que apuesta por el abandono de los dogmas liberales a los que se culpa de la situación actual. Se propone un programa que devuelva a las mayorías la riqueza acumulada por las minorías a base de medidas que en realidad reflejan la vía socialdemócrata clásica. En parte dentro de esta izquierda, en parte fuera, se encuentran los que piensan que esta solución es un parche transitorio, y que la única salida real pasa por la superación del capitalismo y su reemplazo por una alternativa socialista (o similar). Desde esta izquierda en la que me englobo sabemos la importancia de lo que está en juego, y vivimos un clima pre-belico. Velamos nuestras menguadas armas y nos aprestamos a intentar alimentar y canalizar el previsible descontento hacia una protesta social que es la única esperanza ante unas instituciones absolutamente copadas por la derecha.

Y ya está.

Porque fuera de los partidos "populares" y de las "izquierdas minoritarias", resulta clamoros el silencio con el que encaran un momento político tan trascendental.

De Los Verdes cabe esperar poco. A ellos dedicaré una próxima entrada en el blog, porque merecen un análisis aparte, pero es evidente que su fuerza no está en su discurso económico, que es lo que aquí se discute. En clave más española, UPyD ofrece una "leal oposición" y sigue sin desvelar si son "chicha" o "limoná" a ver si va pillando algo del desgaste de los partidos mayoritarios. Es repugnante este partido oportunista y carroñero, pero tengo el convencimiento de que el tiempo les pondrá en su sitio.

Me dejo para el final el clamoroso silencio de la "izquierda mayoritaria" que componen los partidos socialdemócratas entre los que se englobaría el PSOE. La crisis les deja entre dos aguas, corresponsables de la implantación de las prácticas neoliberales que nos han traido hasta aquí, al llegar el momento de definirse son incapaces de encontrar su sitio. Reacios a hacerse la foto pública con sus supuestos enemigos conservadores a la hora de aplicar la nueva vuelta de tuerca, pero incapaces aparentemente de girar 180º y desandar un camino que les alejó de sus posturas socialdemócratas hace muchos años. Balbucean apenas peticiones de ralentizar los recortes, mientras hacen llamadas a la responsabilidad y apoyan cuando les toca esos gobiernos tecnócratas que se van poniendo de moda.

Esperan quizás pasar inadvertidos hasta recoger en el futuro los frutos del desgaste conservador. Espero francamente que no tengan razón al hacer sus cálculos, y que todos recordemos dentro de unos años donde estábamos cada uno en momentos tan decisivos como los actuales.

domingo, diciembre 04, 2011

Golpe de estado político en la Eurozona

Existen varias explicaciones posibles para la absurda crisis de deuda que acogota a una Eurozona cuyos indicadores económicos tanto en nivel de deuda pública, como de déficit, como de balanza de pagos, parecen más saludables que las de países que parecen irse de rositas como EEUU y el Reino Unido. Es evidente en todo caso que no se están tomando las medidas que la política monetaria convencional habilita para acabar con el problema. Si por ejemplo, en EEUU la Reserva Federal ha comprado deuda por más de dos billones de dolares, las compras equivalentes del BCE alcanzan tan solo una décima parte, lo que equivale a una inexplicable inacción. 

Hasta recientemente me sorprendía como todos ante el estúpido empecinamiento por mantener políticas que solo provocan que la situación degenere. Siguiendo la explicación más al uso, estaba convencido de que es el obstinamiento ortodoxo alemán y los beneficios obtenidos por este país a corto plazo, los que dictaban la toma de decisiones. Es evidente que los políticos suelen pensar de forma electoralista y por tanto de cara al corto plazo, pero la irresponsabilidad de la conducta de Merkel al exigir una integrista y suicida política de austeridad a un número creciente de países me resultaba extrañamente irracional, cuando la propia Alemania parece que empieza a sufrit en su propio PIB el resultado de estrangular a sus clientes sureños.

Hablo en pasado, porque esta semana entro en mi cabeza una inquietante idea que me susurra una explicación alternativa y mucho más preocupante. Dicha idea surgió cuando leí en el periódico que ha habido denuncias judiciales al gobierno Griego del PASOK por inflar los datos de déficit, con el objeto de facilitar la imposición de medidas de recorte social. Aunque nada nos sorprende de nuestros gobernantes, es importante destacar que con toda seguridad dicha manipulación costó a los griegos muchos millones de euros en mayores tipos de interés.

Asistimos estos días en España a una guerra total por parte de los voceros de las oligarquías económicas contra todos los aspectos del estado social. Las úlitmas trincheras, constituidas en torno a la educación y sobre todo la sanidad pública, algo intocable hace poco tiempo, se enfrentan a ataques en forma de propuestas de copago y privatización que nadie se hubiera atrevido a plantear hace tan solo unos meses. Y ya de paso, aunque tenga nula relación con la deuda pública, se prepara un nuevo asalto a las condiciones laborales que tiene como más preciado botín el fin de la negociación colectiva. Todo esto es posible ante la amenaza de unos tipos de interés de la deuda desorbitados que nos acercan a la quiebra, lo que ha cultivado un estado de alarma cercano al shock, que mantiene desconcertada a la opinión pública.

Si pensamos por tanto que la inoperancia e ineptitud de nuestros gobernantes económicos están ayudando a  crear las condiciones que permiten desmantelar el modelo social, dicha ineptitud empieza a parecernos premeditada y dolosa. Dado que por mi parte nunca les he considerados estúpidos ni ineptos, sino más bien faltos de escrúpulos defensores de ideologías económicas ultraconservadoras, al servicio de los intereses de los oligarcas financieros, es a mi al que se me empieza a poner una creciente cara de tonto. Y una vez que llego a este punto, analizo de forma diferente las fluctuaciones de la prima de riesgo, que por casualidad aprieta a unos países u otros de forma que se me antoja convenientemente coordinada de la mano de las selectivas compras de deuda por el BCE.

Así pues, mi lado más paranoico me muestra un plan premeditado para fomentar la crisis de deuda como herramienta para imponer al extremo las políticas neoliberales, aún a costa de dañar una economía de una Eurozona que vuelve a entrar en recesión. Como integristas que son, no les importa el daño que causen con tal de imponer sus creencias a los infieles. Los recientes cambios políticos constituirían por tanto un auténtico golpe de estado premeditado, y no una negativa deriva de unos hechos económicos desgraciados.

Y siguiendo por ese camino, el razonamiento me lleva a un punto mucho más preocupante. Si el dolor económico que sentimos es en buena medida auto-inflingido, y si la ciudadanía carece de capacidad de resistencia (como la mayoría absoluta del PP en España indica) para evitar la puesta en marcha de la hoja de ruta de recetas ultraliberales, es de esperar que una vez conseguidos los objetivos, se retire el castigo. En una población ignorante de como se mueven los hilos económicos, quedará grabado el pensamiento condicionado, identificandose en el subconsciente colectivo la protección social y estado de bienestar con crisis de deuda y sufrimiento económico, lo que trataría de solidificar la doctrina neoliberal como verdad incuestionable por un largo plazo. Este podría ser el objetivo último y más retorcido del plan en marcha.

Y lo más preocupante es que cuanto más lo pienso, más me convenzo de que mi lado paranoico está en lo cierto, y de que el plan tiene todos los visos de funcionar.

sábado, noviembre 26, 2011

Devastadora charla con un dirigente de CCOO

El día de las elecciones, se pasó a votar en nuestro pueblo un vecino que pertenece a la dirección de CCOO, afiliado a su vez a IU si bien integrado en la organización de Madrid. En el ratito que estuvimos charlando salió inevitablemente el tema del papel del sindicato en los últimos tiempos. Aunque la conversación era de cortesía, no pude morderme la lengua lo suficiente, y pronto estábamos intercambiando opiniones al respecto de los últimos acuerdos del sindicato con el gobierno ZP. Una conversación tristemente esclarecedora y que creo merece la pena compartir.

Argumentaba nuestro compañero que la reforma de las pensiones pactada era buena. Lo era en primer lugar poque garantizaba que estas se pudieran seguir manteniendo, lo era en segundo lugar porque en realidad muy poca gente se iba a jubilar a los 67 años, y lo era en tercer lugar porque se había conseguido mejorar la oferta inicial del gobierno. Me propuso mandarme el análisis completo del resultado de la reforma para demostrarme que lo que había llegado a la opinión pública era una visión sesgada del acuerdo. Se quejaba por último de que el apoyo a los sindicatos es debil como se demostró en la (en su opinión) fallida huelga general de Septiembre de 2010, y que ya les gustaría contar con más fuerza negociadora.

Es decepcionante ver hasta qué punto han perdido las dirigencias de nuestros sindicatos mayoritarios la percepción de la realidad así como del papel que deben hacer en la sociedad. En cinco minutos me puso encima de la mesa todos lo que en mi opinión son sus problemas y errores que han convertido el ala sindical en el eslabon más debil de las fuerzas con las que contamos para luchar la batalla contra el sistema económico que nos estrangula.

En primer lugar, hablar de que el sistema tal como está es insostenible, implica haber asumido lo más profundo del pensamiento capitalista neoliberal. No entraré en repetir los argumentos contra este principio de insostenibilidad que ya enumeró perfectamente Vinçenc Navarro el pasado invierno, lo importante es destacar como el sindicato ha asumido el pensamiento único, lo que explica su predisposición a negociar continuos recortes de derechos.

En segundo lugar, está el hecho de aceptar como bueno el acuerdo porque rebaja los recortes inicialmente propuestos. Para unos sindicatos que han quedado reducidos al papel de negociadores, resulta decepcionante ver lo poco avispados que resultan en el empeño. Como turistas regateando en un zoco arabe, se llevan la baratija a la que han reducido el precio inicial a la mitad, sin ser conscientes de que la oferta inicial no era más que una postura máxima del vendedor que le da margen para un regateo favorable.

En tercer lugar me sorprende que no se den cuenta de la importancia de la percepción de la realidad incluso por encima de la realidad misma. El campo de batalla no es solo la mesa de negociación, sino la propia opinión pública y las bases trabajadoras que constituyen su único arma a esgrimir frente a las oligarquías capitalistas y el gobierno que las ampara. Incluso en el hipotético caso de que el acuerdo tuviera algo bueno, la percepción pública seguiría siendo de retroceso y de derrota sindical, lo que enlaza con el siguiente aspecto del problema.

En cuarto lugar está el no darse cuenta de que la lucha de los trabajadores es continua y a largo plazo, y que poner el freno a la velocidad de las rebajas sociales no cambia el rumbo catastrófico que llevamos. Incluso si el acuerdo alcanzado limitara los daños, la firma del sindicato legitima el principio de que la reforma es buena y desarma toda posible resistencia. Se admite la derrota a priori, y se está dispuesto a negociar las condiciones, sin darse cuenta que una oposición frontal que llevara a una imposición de normas sin acuerdo sindical, reforzaría su perdido prestigio como auténticos defensores de nuestros derechos, erosionando al gobierno que las tomara y debilitando su posición ante futuros recortes.

En general, nuestro compañero nos confirma una imagen de unos dirigentes sindicales que no creen en alternativas al pensamiento neoliberal, que se sienten derrotados de antemano, que se saben sin ningún respaldo y que carecen de habilidad negociadora. Y sin embargo quizás lo peor de todo es hasta qué punto tienen interiorizado que el papel del sindicato es el de ser una institución más del sistema, al fin y al cabo al servicio de su mantenimiento, en lugar de considerarlo como un elemento de lucha de los trabajadores para transformarlo.

No es nada sorprendente ver esta semana la suavidad con la que Toxo y Mendez se dirigían al partido ganador en las elecciones ofreciendose incluso a sentarse a negociar (¿nuevos recortes?). Uno hubiera deseado a unos combativos dirigentes amenazando desde ya al gobierno, mostrándose como una primer linea de oposición ante sus previsibles medidas. Se hace necesario una refundación completa de los sindicatos, pero uno se pregunta si queda alguna cosa que salvar en ellos hoy en día, y si no sería mejor empezar la casa desde los cimientos.

lunes, noviembre 21, 2011

Empieza la lucha. Queda un día menos para acabar con el PP

Debe ser la edad y la experiencia, pero por una vez creo que casi todos mis pronósticos se han cumplido. La contienda electoral nos deja donde se preveía, y se antoja como una primera batalla de una guerra mucho más larga, una batalla que al menos podemos decir que no hemos perdido y que nos permite seguir la lucha. Las máscaras han caido, la farsa bipartidista ha quedado de momento tocada, y todas las esferas de gobierno de nuestra pseudo-democracia quedan en manos de la derecha más rancia. Los resultados de ayer conjuran una serie de peligros para IU que merece la pena enumerar.

El más importante era que el PSOE hubiera salido con bien de su suicida deriva derechista. La respuesta clara de su electorado nos da la esperanza de que aún queda alguna capacidad de crítica entre amplios sectores que se consideran de izquierda. Su resistencia a buscar alternativas en la izquierda real era esperada, pero el socioliberalismo queda herido de muerte en España. Un enemigo menos (de entre tantos).

El segundo es que la operación EQUO ha resultado un gran fracaso. Seguramente porque competían con UPyD como alternativa light al PSOE; y sin embargo el peligro que EQUO  constituía era muchísimo mayor que el del partido de la populista Rosa Díez. Se buscaba montar un partido ecologista al estilo de los que campan por Europa que distrajera a la gente de veleidades alternativas en las horas bajas de los socialdemócratas. La inclusión de Inés Sabanés entre sus filas intentando arrastrar a votantes de IU ha tenido un efecto limitado, y se antoja un corto recorrido a esta peligrosa iniciativa.

Un tercero es que los sectores ahora minoritarios en IU y que han defendido históricamente el acercamiento al PSOE no hayan quedado legitimados. Tenemos las manos libres para profundizar en el camino que iniciamos hace un par de años con la llegada al puesto de Coordinador General de Cayo Lara.

Conjurados pues todos esos peligros, salimos de la contienda electoral indemnes y en buena disposición para empezar en serio la batalla de verdad, la que hemos iniciado contra el poder de las oligarquías financieras que han puesto su objetivo en el desmantelamiento de derechos sociales y nuestro precario estado del bienestar. Ya no se pueden esconder detras del falso socialismo lo que nos facilitará en buena medida la movilización contra lo que es un gobierno descaradamente derechista.

Hoy empieza la lucha de verdad, y lejos del desánimo, no puedo menos que recordarme que hoy queda un día menos para que acabemos con el PP, la segunda pata de la farsa bipartidista.

sábado, noviembre 19, 2011

El PSOE convertido en partido zombi


Mañana, a las ocho de la noche, se hará efectivo a traves de las primeras encuestas a pie de urna, algo que todos damos ya por descontado. Un Partido Popular con cerca o por encima de 200 escaños, y un PSOE superando en poco los 100, y es sin duda esta segunda parte la que abre perspectivas más interesantes para el análisis.

Acabamos una campaña que desde mi perspectiva (muy mediatizada por otra parte por mi implicación con IU), nos deja una imagen del PSOE absolutamente desastrosa. Frente a las nuevas vueltas de tuerca que medio anuncia medio esconde el PP, he visto tan solo a una IU muy combativa, motivada y activa, y un partido socialista arrastrando excusas, paseando apolillados dirigentes y proponiendo tan solo una cierta moderación en la aplicación del mismo programa de ajustes de los populares. Hasta la tradicional apelación al voto util ha sonado en mi opinión más triste, desganada y derrotista que habitualmente. No puedo imaginarme qué es lo que podría dar algún tipo de motivación para que un votante socialista se acerque a las urnas mañana.

Así pues volvamos al día de mañana a las ocho de la noche. Es facil preveer lo que pasará en las siguientes horas y días después de la debacle. La asumpción de la derrota, las caras de circunstancias en los dirigentes en la previsible reunión del lunes en Ferraz. La puesta de disposición de su cargo por parte de Rubalcaba a la ejecutiva y su ratificación posterior, la convocatoria de un congreso extraordinario antes incluso de las elecciones andaluzas. Es también previsible los movimientos de Carmen Chacón, pasado el primer momento de duelo, postulándose  como alternativa a Rubalcaba. En realidad es bastante previsible porque hemos conocido otras derrotas electorales en todos los partidos, y sin embargo esta derrota electoral se me antoja diferente por varios motivos.

En primer lugar porque el PSOE da la impresión ahora mismo de ser un partido zombi. Guiado por un puro instinto electoral, carece de ideario creible tras el descrédito del socioliberalismo, y lo que es peor, no se vislumbra entre sus partidos hermanos europeos una guía o un programa que emular. Carece por tanto de ideas y propuestas creibles sobre la que cimentar su reconstrucción.

En segundo lugar desconocemos la existencia de ningún tipo de posturas críticas o alternativas en un partido que se convirtió hace tiempo en una maquinaria sin alma ni debate. Ni una voz se levantó para criticar las medidas que le han llevado a la debacle. La propia Carmen Chacón pretende basar su candidatura en el hecho de ser mujer, lo cual es una novedad en España para un grán partido. El problema es que a esta resulta imposible catalogarla políticamente, no sabemos lo que defiende y representa más allá de un catalanismo que tratará de ocultar y que solo le restará simpatías y posibilidades. Carece por tanto también de rostros que personifiquen el nuevo rumbo.

En tercer lugar, no solo es esta crisis del partido más profunda y más grave que las anteriores, sino que le llega en un contexto político muy poco adecuado. El PP no llegará al poder como en el 95 tras una victoria mínima, sino que lo hace con una mayoría absoluta. Y se lanzará con absoluta violencia a imponer un programa de máximos. A esta situación de máxima necesidad se enfrenta el partido indefenso, sin discursos, con lideres interinos y sin credibilidad. En un momento crítico, el mundo no va a esperar al PSOE, y cuanto más tarde en recomponerse, más trabajo le costará intentar volver a ser visto como una alternativa válida.

En cuarto lugar, no parece que la oposición al PP vaya esta vez a protagonizarse en el parlamento. La poca o mucha resistencia que se ofrezca al brutal programa de recortes y desmantelamiento de derechos y libertades se va a cimentar en las calles. Y cuesta imaginarse al PSOE protagonizando ninguna movilización sociala corto plazo, como demuestra su falta de visibilidad en las manifestaciónes contra el recorte educativo que ha puesto en marcha el PP.

Así están me temo las cosas. Un partido que como antes indicaba se me antoja como un zombi, un muerto viviente sostenido sobre un monton de intereses por partes de unos cuadros que se han beneficiado de los réditos que dan el control de las distintas administraciones. Sin ideario, sin fé y sin respuestas más allá de la búsqueda de victorias electorales, el futuro se presenta incierto lo que no deja de resultar más interesante que la lamentable historia reciente de uno de los polos del bipartidismo español.


viernes, noviembre 11, 2011

El 20-N se acaba una época y empieza otra nueva.

Estos días en que parece que la historia se acelera, leo, leo, leo. Internet nos permite no solo conocer lo que ocurre en el mundo saltandose intermediaciones de medios controlados, más importante incluso para mi, nos permite conectar inmediatamente con lo que piensan los tuyos, con lo que dicen y opinan los que no son los tuyos, prestar oidos a los rumores más bajos que te anticipan lo que va a pasar. Y tiene pinta de que van a pasar cosas, y muchas en las próximas semanas y meses. Los signos son evidentes para quien esté atento a ellos, y bastan unos ejemplos.


La crisis de la Eurozona ha llegado al punto de la ruptura de consensos. Según caen los países, ya no son los medios marginales de la izquierda los que hablan de las contradicciones de la construcción Europea, del absurdo papel del BCE, de la crisis de legitimidad democrática y de lo suicida de las políticas extremistas neoliberales en las que Europa se ha embarcado. Ahora las voces críticas llegan de los gobiernos conservadores de EEUU y del Reino Unido y de medios como el New York Times el el Guardian. Mientras, los dirigentes de Europa se enrocan, quizás pensando que ya no tienen otra salida que seguir para adelante, pues reconocer su error se los llevaría por delante a ellos y a las posiciones ideológicas que representan.

En Grecia preparan un gobierno de unidad nacional que tendrá aún menos legitimidad que el anterior (que al menos había sido elegido en las urnas). Dudo que los griegos se apresten alegremente a seguir sus dictados en forma de nuevos recortes que caen sobre una ciudadanía agotada, menos aún cuando Papandreous rompió el embrujo hablando de someter las medidas a referendum. Si hasta ahora la carga de la crisis cayó en el PASOK, ahora se llevará por delante a Nueva Democracia. Me temo que la cuerda se puede romper, y de las revueltas puede surgir cualquier cosa, incluido un golpe militar. Más nos vale estar atentos, porque en buena medida estamos viendo nuestro propio futuro. Italia se encamina en la misma dirección, y aunque tiene mucho recorrido antes de que la situación se vuelva tan extrema como en Grecia, igual no cabe esperar la misma paciencia con la que los griegos han aguantado el castigo recibido. Tampoco es facil predecir lo que durará la paciencia de los portugueses, con la variante de que su ejército no parece pueda convertirse en garante de una represión ante las posibles revueltas.

Desde primeros de año, la ciudadanía, aún desinformada y manipulada, empieza a dar signos de vida en muchos de nuestros países. En mi opinión, el movimiento del 15-M no es como algunos creen una valvula que permite eliminar presión de descontento popular, y que acabará desactivandose. Se me antoja más bien como unos ejercicios de estiramientos de una ciudadanía que durante decenios ha estado adormecida. En los últimos meses multitud de personas han conocido la experiencia y descubierto una cierta capacidad de conseguir objetivos mediante la movilización, y lo que es más importante, han roto con el principio de la legitimidad de las urnas para justificar todos los atropellos. Estamos aún verdes, pero se ha avanzado para prepararnos para lo que vendrá.

Las elecciones se nos echan encima en lo que parece un episodio triunfal más del inmovilismo bipartidista. Sin embargo, si yo fuera un dirigente del PP no las tendría todas conmigo. El desastre sin paliativos  que se augura al PSOE obligará a cambios profundos en lo que ha sido un perfecto representante de la deriva liberal y el abandono de las posturas socialdemócratas en Europa. Mientras su organización se recompone, el sistema dejará de tener en el partido socialista un perfecto muro de contención que mantiene callados entre la verguenza y la culpa a sus muchos millones de incondicionales seguidores. El PSOE cae abandonado por los suyos debido a su deriva entregista a los poderes económicos, y de su debate interno surgirá seguramente el replanteaminto de los dogmas socioliberales de los últimos años. De entre sus dispersas filas surgirá un PSOE diferente, o bien se alimentaran otros movimientos que nos ofrecerán nuevas oportunidades. En cualquier caso podemos estar ante el desbloqueo de una situación que se ha mantenido estable en los últimos 30 años.

El Partido Popular, sin duda el más trasnochado, tardo-fascista y reaccionario representante de la derecha europea, se apresta a una victoria histórica que le dará un poder absoluto en la política española, y vendrá con el cuchillo en la boca de la mano de sus sectores más integristas. Con la borrachera propia de la aplastante victoria, acometeran con furia toda su agenda de contrareformas al amparo de lo que Naomi Klein tan brillantemente catalogó como doctrina del shock. De su euforia dan buena imagen su disposición a desmantelar los recientes avances en materia de derechos y libertades, algo a lo que en pasadas victorias no se atrevieron. Y creo que se van a equivocar, porque detrás no tienen como creen un pueblo entregado y dispuesto al masoquismo a la espera de que la biblia neoliberal les purifique y saque del desastre, sino una ciudadanía excéptica con poca paciencia. El PP asentará su victoria en la movilización masiva de sus incondicionales, la abstención de los desencantados del PSOE y la credulidad de los más desesperados. Si creen que esta victoria por abandono les da crédito para mucho tiempo y para muchas cosas, sospecho que se equivocan.


Todo lo que ocurre a nivel internacional y nacional nos augura una situación de conflicto social en España y en Europa de un calibre diferente a lo que hemos conocido en las últimas décadas. Se caen los muros de contención, se corren los velos que ocultan la realidad y creo que empieza una nueva época de crisis y conflicto que nos devolverá algo diferente. Creo que en el futuro nos apuntaremos el día 20 de Noviembre como fecha clave en dichos cambios en nuestro país, el día en que muchas cosas se acabaron y otras empezaron a surgir.

miércoles, noviembre 09, 2011

Habrá que vomitar todo el neoliberalismo ingerido.

Es un simil que me viene a la cabeza según leo un interesante artículo de los que uno suele encontrar en Rebelión (¿Donde está la izquierda en esta tormenta económica?). Aprovecho para recomendar a todo el que pase por este blog que visite asiduamente su página como fuente de información y opinión alternativa.

El otro día acompañaba a mi hijo mientras sufría las nausas derivadas de su leve gastroenteritis (o quizás de una simple indigestión). Abrazado al inodoro me decía que no quería vomitar, y yo le explicaba que una vez que el estómago se ha cerrado, el cuerpo iba a hacer todo lo posible para expulsar aquello que ya no podía digerir. Le explicaba que aunque el vómito no es precisamente un proceso agradable, era un paso necesario para encontrarse mejor, y que retrasándolo tan solo prolongaría su malestar para llegar al mismo inevitable final. Una vez que este se produjo pudimos ambos salir de cuarto de baño y pudo él encontrarse mejor para volver a sus juegos.

Leyendo el artículo de Rebelión, me doy cuenta del paralelismo que tiene el sufrimiento de mi hijo con el sufrimiento económico que todos estamos pasando. Durante 30 años, los ideologos del sistema nos han recetado una dieta económica alta en neoliberalismo económico que hemos ingerido sin rechistar. Y lo hemos hecho porque a corto plazo resultaba gratificante para todos, los poderosos se forraban y nos dejaban disfrutar de un crédito barato que nos hacía disfrutar de esas vacaciones, o de ese coche nuevo a cargo de un endeudamiento que parecía no tener límite. Algunos economistas de izquierdas actuaron como Pepito Grillo, alertando de lo insostenible del proceso en el que entrábamos. Obviamente era inutil, ¿quién quería escuchar al aguafiestas de turno con lo bien que nos lo estábamos pasando?

En 2008 se nos hizo a todos evidentes que estábamos enfermos, nuestro sistema no puede ya digerir el empacho de medidas económicas nocivas. Tras un primer susto, nuestros ideologos al mando nos recetaron una manzanilla y un poco de dieta en forma de gasto público con la esperanza de poder volver a nuestra dieta habitual tras una indisposición pasajera. Sin embargo una vez que se hace evidente que el remedio no nos cura, los más radicales toman el mando y deciden que nuestro problema se cura con una dosis doble de medidas neoliberales, la receta se ha aplicado con absoluto celo en Grecia. Lo único bueno del tratamiento es que tiene pinta de que va a acabar de destruir el prestigio de los curanderos a cargo, y el error empieza a ser admitido públicamente hasta en los medios del sistema. El paciente ya no dá más de si, hay un límite al sufrimiento que hasta los más necios podemos aguantar, y todo parece indicar que los griegos están relativamente cerca de alcanzarlo.

Como mi hijo el otro día, Grecia, y los demás, no vamos a tener más remedio que expulsar todo lo que nos han hecho tragar si queremos encontrarnos mejor, y será penoso, porque han sido muchos años y muchas medidas nocivas. Son reformas fiscales que han beneficiado a las rentas de capital, son desregulaciones laborales que han desprotegido a los trabajadores y multiplicado la inseguridad econónica, son desregularizaciónes de los sistemas financieros que han provocado la especulación, son privatizaciones de sectores básicos que no pueden estar al servicio del beneficio de algunos, son medidas de desarme arancelario que han provocado el desmantelamiento de nuestros sectores productivos, son políticas monetarias puestas al servicio de garantizar la protección de las riquezas acumuladas por parte de unos pocos. Y desmantelarlo no va a ser facil, puesto que forman un entramado interrelacionado de legislaciones, tratados y organismos nacionales, europeas y supranacionales que se sustentan unas sobre otras, lo que hace imposible eliminarlas poco a poco. Lo han ido atando todo de forma que me temo que su expulsión tendrá que ser en forma de un vómito violento y súbito. Habrá que sufrir contando además con la resistencia no pacífica de aquellos que se beneficiaron y que no van a querer renunciar a lo conseguido en estos años.

En España andamos todavía en una fase de malestar no tan agudo, pero nos queda poco. Lamentablemente, ante la evidencia de que las medidas paliativas no nos curan, todo parece indicar que en lugar de tomar el dificil camino de la purga, nuestros compatriotas están dispuestos a dar plenos poderes durante cuatro años a los charlatanes recetadores del veneno neoliberal, con la esperanza de volver a los días de vino y rosas. El cuerpo dudo que no nos vaya a dar para aguantar tanto, pero nuestra estupidez nos garantiza que el proceso de limpieza llegue de forma más tardía y violenta, porque no creo que aquellos a los que les vamos a dar plenos poderes ahora, acepten su equivocación o renuncien a los mismos facilmente.

Como mi hijo el otro día, nos resistimos a pasar el mal trago de vomitarlo todo. Pero habrá que hacerlo queramos o no, y cuanto más esperemos más alargaremos nuestro sufrimiento actual.

domingo, noviembre 06, 2011

Ocupa el debate

Anonymous y el 15M convocan una concentración a la entrada del debate electoral del 7N

Cerrando la caja de Pandora

Esta semana una mano griega (es de justicia que fuera griega) abrió la caja de Pandora. La mención de Georgios Papandreou del sometimiento a referendum desató una tormenta que en un contexto menos grave hubiera resultado francamente cómica. En unas pocas horas se acumularon perlas dificiles de olvidar, como ese político español que indicaba que el tema era demasiado complicado para que la gente pudiera decidir; por no hablar de esos otros que indignados protestaban por las consecuencias para los otros países de un posible rechazo de algo que se supone que era en beneficio de los griegos.

Fue un leve resquicio, apenas 24 horas que dejaron al descubierto las verguenzas de un sistema que aún se atreven a llamar democrático. Y aunque el amigo Papandreou evidentemente ha utilizado todo el tema como herramienta política, y dudo que en ningún momento tuviera la intención de llevar adelante el referendum, el favor que nos ha hecho es inmenso, porque la caja de Pandora no se ha cerrado sin dejar escapar alguno de los bienes que contenía.

Durante unas horas nos dió tiempo a saber que los griegos parecían según las encuestas dispuestos a dar el no al referendum, y rechazar lo que se nos ha vendido como una ayuda. Se rompió además el tabú y se habló de la posibilidad de que la gente fuera consultada ante las medidas de recorte. Se habló finalmente de lo innombrable, de la opción del impago de la deuda como alternativa al desmantelamiento de nuestros derechos en aras de proteger la riqueza acumulada durante la fiesta neoliberal. Pero por encima de todos quedó claro que nos han robado toda capacidad de decidir en todo aspecto relevante de nuestro sistema, lo que resulta esclarecedor como aperitivo antes de la campaña electora.

Entiendo que a muchos dirigentes europeos les gustaría contar con el aparato aquel de la película "Men in Black" que permitía borrar la memoria reciente a la gente. Lamentablemente no va a ser posible, y aunque se eviten el impacto de un referendum que tan solo por el hecho de plantearse ponía contra las cuerdas al resto de gobiernos de la eurozona; no podrán evitar que recordemos el día en que oficialmente nos informaron de quién manda aquí.

domingo, octubre 23, 2011

Oidos sordos del poder ante las protestas en las calles.

No se cuando empezó, es posible que fuera ese idolo de la "lideresa" Aguirre, la dama de hierro británica que se mantuvo impasible ante las protestas sindicales mineras de los 80 y a la que una guerra y el fervor nacionalista que le acompañó salvó de una derrota electoral segura. El caso es que muchos años despues asistimos a movimientos de protesta masivos en Grecia, que parecen ser compatibles con la impasibilidad de unos gobernantes que se aprestan a dar nuevas vueltas de tuerca al dictado de sus socios financieros y los poderes financieros a los que defienden. En España, una vez que los anestesiados circulos cercanos al PSOE despierten su capacidad de crítica y movilización con la derrota electoral, veremos en los próximos meses reacciones masivas ante las descarnadas medidas de recorte social con las que la secta neoliberal que gobierna el PP nos va a recetar. Pero no parece que una perspectiva como esa parezca preocupar a los previsibles ganadores.

Estamos ante un conflicto de legitimidad entre la acción de la gente en las calles y los elegidos mediante los votos en las elecciones, que parece resolverse a favor de los segundos, algo que es aparentemente lógico. Las calles no parecen representar una medida de la voluntad popular cuantificable como si lo es el resultado de unas elecciones. Seguros tras el parapeto de unos resultados electorales que parecen perfectamente amarrados, Rajoy y los suyos esperarán al igual que hace Papandreu, a que las protestas se agoten ante la evidencia de su imposibilidad de alcanzar ningún resultado.

En este estadode cosas es en la que debemos movernos y al que debemos adaptarnos. Es una realidad que el sistema electoral está atado y bien atado. Con un bipartidismo que tiende a aglutinar el voto en lo que a la gente le parezca la opción menos mala, y que arrastra al descontento y la abstención a gran parte de la población, conjugado con unos medios de propaganda perfectamente engrasados y que no dejan apenas resquicios a planteamiontos minimamente críticos, las posibilidades de alcanzar un cambio relevante por la vía parlamentaria se antojan más que remotas incluso en circunstancias de descontento popular generalizado.

¿Debemos aceptar el dictamen electoral como medida social justa e indiscutible y abandonar por tanto vías alternativas de acción política? Resulta sumamente dudose, de la misma manera que un apoyo masivo al nazismo no legitimaba sus atrocidades. Incluso en momentos de crisis en que se arrastra a la miseria y la penuria a amplios sectores de la población, siempre hay unas mayorías que bien por defender lo que ellos han asimilado como privilegios, bien sea por resignación y miedo ante perspectivas aún peores que ven en sus vecinos más desfavorecidos, están dispuestos a apuntalar el sistema que en realidad les estrangula. Que en una sociedad como la nuestra conviva gente que pasa miseria, con grados de acumulación de riqueza nunca antes vista, es injusto e inaceptable, Y lo sigue siendo por más que la ignorancia, la falta de fé en ninguna alternativa, la indiferencia, el egoismo o el miedo lo legitimen electoralmente. El sistema ha utilizado y utilizará a esas mayorías que sufren algo menos y que temen perder sus algo mejores niveles de bienestar, como barricada que frene las aspiraciones de cambio social, y que proteja a los que realmente se lucran y enriquecen.

Mi respuesta es obviamente negativa. Debemos sin embargo prepararnos para adaptar nuestra lucha a las circumstancias sin aceptar las reglas del juego que no nos benefician. Hace un año los sindicalistas franceses nos enseñaron que las huelgas masivas son menos efectivas que huelgas selectivas en las que se bloquean sectores clave cuyos trabajadores pueden enfrentartarse al recorte de ingresos con el apoyo del resto de compañeros de otros sectores. Los boicots selectivos como propone Anonymus, la resistencia pasiva, las propias acampadas, la canalización del descontento fuera del seno de los partidos políticso, son formas nuevas de activar el conflicto que deben representar solo un primer paso en un camino nuevo que quizás nos permitan desbloquear la situación. En nuestro favor la certeza de que la larga crisis que aún nos espera por delante abrirá los ojos a un porcentaje creciente de la población.

miércoles, octubre 12, 2011

El 15-O llega

Confieso mis dudas iniciales hacia lo que significaba el 15-M. No fuí a aquella manifestación y me quedé a la expectativa, desde entonces he pasado a sumarme a casi todas las convocatorias que han fluido desde el movimento. No puedo faltar a la del 15-O, no deberíamos faltar nadie, aunque solo sea por la bofetada que supone a los muchos enterradores que hay del movimiento, aunque solo sea por ver a Esperanza Aguirre revolverse ante su plaza tomada una vez más, aunque solo sea por ver a Rubalcaba balbucear apoyos a los que en realidad le estamos acusando mientras quizás masculla como volver a mandar a la policía para intentar acabar con la movilización..

Apredizjov nos pone en el foro de IU un link a un fantástico video preparado por Juventud Sin Futuro que creo que dice mucho de la labor que estos movimientos están haciendo para concienciar a la gente, y con más éxito del que desde partidos como IU hemos tenido hasta ahora.


domingo, octubre 02, 2011

Vosotros, la mayoría

El otro día en un foro de vecinos en internet, mi mujer era acusada de movilizarse por el tema de los recortes educativos de Cospedal en lugar de preocuparse por los temas "de aquí", del vecindario, del pueblo. Nos acusaba a nosotros los políticos (curioso, porque ni mi mujer ni yo tenemos cargo político alguno, y ella ni siquiera milita en ningún partido) de no hacer lo que debíamos, de preocuparnos por temas políticos y no por lo que él consideraba importante. Lo triste y gracioso a la vez, era que la acusación venía de alguien que aparte de escribir en el foro en cuestión, dudo que nunca haya tomado alguna iniciativa política o social por si mismo. Nos indicaba a los demás el camino que debíamos seguir como si él no tuviera ninguna responsabilidad, y lo hacía desde un nick, sin siquiera dar su nombre, pero con un aire de superioridad moral que incluso en estos tiempos no pudo menos que dejarme estupefacto

Mi vecino en cuestión, iqual que tu que me estás leyendo, vosotros sois la mayoría, la inmensa mayoría. Esa mayoría que se queja pero que nunca hace nada, que no se manifiesta en defensa de sus derechos, que no sigue la huelgas, que no se afilia en ningún partido político ni sindicato, que no participa en ninguna organización ni asociación, que se queja de la política y aún se atreven a criticar a los que hemos decidido hacer algo, moverse, luchar. Vosotros, la mayoría, ¿que pensais? ¿A que esperais? ¿Que haceis? Intento comprenderos y ninguna de las explicaciones que se me ocurren para vuestra pasividad e inacción resulta exculpatoria.

Es posible que sea simplemente pereza. Esa holgazanería del que prefiere dormir la siesta o ver un partido de futbol, o tomarse un cubata con los amigos en el bar a la espera de que otro les haga el trabajo, les organicen la vida y les arreglen los problemas.

Es posible que sea ignorancia, incapacidad para entender y tomar las riendas de su propia vida, como borregos en un rebaño guiados por un pastor que lo mismo les puede estar llevando a pastar como al propio matadero. Ignorancia conocida y aceptada por vosotros mismos y contra la que no poneis remedio mientras veis telenovelas, programas de cotilleo o el partido de vuestro equipo de futbol en la televisión.

Es posible que sea cobardía, miedo a perder el trabajo, a ser señalado por tus vecinos, a significarte demasiado, remoras de un franquismo que consiguió domesticar en el terror a nuestros padres y abuelos, pero dificil de justificar en la mayoría de nosotros.

Es posible que sea insensibilidad y egoismo. ante una realidad que sabemos injusta pero que quizás no nos está afectando a nosotros mismos (aún). Porque aún no hemos perdido el trabajo, porque no somos funcionarios, porque no somos pensionistas, porque no nos han embargado la casa.

Es posible que simplemente os penseis inútiles. Que hayais decidido que no podeis hacer nada, que no servís para nada, que no podeis cambiar nada. Que os hayais rendido sin siquiera haber luchado nunca, que os hayan domesticado en la obediencia y en seguir el camino marcado mientras quizás farfulleis protestas huecas.

No se si vosotros, la inmensa mayoría, sois perezosos, ignorantes, cobardes, insensibles, egoistas o si os pensais inútiles. Lo siento pero no os disculpo por ello. Lo que se es que yo cada día pienso qué es lo que puedo hacer para tomar las riendas de mi vida y para arreglar las cosas que no me gustan. Y se que durante mi vida he montado asociaciones, me he manifestado, he hecho huelgas y participado en piquetes, he pasado miedo ante cargas policiales, he participado activamente en más de un partido político, he sido candidato electoral, he gastado tiempo, empleado vacaciones y gastado dinero en todas esas ocasiones, e incluso hago un blog para comunicar lo que pienso. Y se que lo que hago no cambia gran cosa, pero lo hago para mirarmen en el espejo y no sentirme perezoso, ignorante, cobarde, insensible egoista o inutil.

Lo que se es que incluso entre los votantes de IU (que en nuestro pueblo fueron más de trescientos) entre gente que ideológicamente muestra mediante su voto un mayor desacuerdo con la situación actual, apenas una decena están dispuestas a hacer algo más que votar cada cierto tiempo. Y los siento pero vosotros también conformais una mayoría de gente incapaz de hacer gran cosa, y dejais que seamos unos pocos los que os hagamos el trabajo.

En todas mis actividades políticas y sociales he conocido a alguna de esa gente que compone la minoría que si se mueve. Gente valiente, inteligente, comprometida, activa, idealista, altruista y generosa. Quizás equivocados, quizás no compartiera sus puntos de vista, pero todos me parecieron siempre admirables en sus compromisos individuales con lo que creen, con sus causas y con sus luchas. Ellos están allí y mantienen la llama encendida a la espera de que vosotros, la gente que formais la mayoría, decidais salir de la apatía, el conformismo, la pereza, la ignorancia, la insensibilidad, el egoismo o cualquiera que sea el motivo que os mantiene callados y quietos en vuestras casas. Son pocos, somos pocos, y sin vosotros no podemos hacerlo.

Y por favor, si decidis seguir por el camino de la mayoría que no hace nada, ahorradme al menos vuestros consejos, vuestras palabras de superioridad y vuestras críticas vacías. No teneis derecho.

sábado, septiembre 24, 2011

Si me engañas, la primera vez es culpa tuya. Si me engañas por segunda vez, es culpa mía.

El título de la entrada es un aforismo conocido por todos y que aparentemente tiene origen árabe.

Si me engañas, la primera vez es culpa tuya. Si me engañas por segunda vez, es culpa mía. 

Cuando triunfó el PSOE en el 82 yo mismo, que aún no tenía 18 años pero que hubiera votado al PCE, me alegré y pensé que nos esperaba algo mejor. Gonzalez me engañó una vez, pero desde entonces no he vuelto a celebrar una victoria de un partido que no es más que un puntal importante de status quo. El PSOE languideció despacio, tan grande fué la confianza que recibió como el tiempo que tardó la gente en darse cuenta del engaño.

Tras ocho años del inaguantable Aznar, el PSOE se sacó a Zapatero de la chistera. ¡No nos falles! Le gritaban ingenuamente sus votantes tras su victoria del 2004. Ocho años más han pasado, y Zapatero ha hecho bueno al lider del Felipismo en cuanto a recortes sociales (en cuanto a su nivel de corrupción y falta de ética no creo ningún otro político español le llegue ni a las suelas a Gonzalez, uno de los personajes más siniestros de nuestra historia reciente).

No hubiera sido dificil de entender que el mal no podía ser Gonzalez sino el PSOE en si, bastaba con ver como sus diputados en pleno respondían como un ejército a las instrucciones de su jefe. Los que pudieran haber pensado que el problema era el lider y que un cambio de cúpula cambiaría las cosas, deberían haber abierto los ojos tras la experiencia de Zapatero.

El PSOE lo intenta de nuevo, solo que esta vez ni siquiera se han molestado en buscar una cara nueva. Nos presentan como un cambio alguien que ha compartido gobierno y seguido sin problemas los dictados de los dos líderes anteriores. Los votantes del PSOE tienen la oportunidad de demostrar si son acólitos obedientes o si son ciudadanos libres.

Está claro que si te engañan una segunda vez es culpa tuya, pero no se me ocurre calificativo no despectivo para los que se dejan engañar una tercera.

domingo, septiembre 18, 2011

De profersores, de alumnos y de padres

Esta semana empezó el curso de ESO en el instituto de mi hijo con una reunión en la que los profesores explicaron a los chavales el impacto de los recortes en su próximo curso. Sin profesores de apoyo, sin nadie que pueda controlar la asistencia a clase, con el horario de la biblioteca reducido, con profesores que dan a impartir clases que no son sus especialidades...Los profesores del Instituto Aguas Vivas de Guadalajara parece que han dicho basta y se están movilizando. Es una sorpresa a la luz de la nula incidencia de las últimas huelga de funcionarios en la que se les redujo su salario.

Nos pasan una nota informativa a los padres indicando el efecto de las restricciones en la educación de nuestros hijo e invitándonos a apoyarles mediante la asistencia a la asamblea que tendrá lugar la semana que empieza. Me cuenta Julia con cierta desesperación la pasividad con que algunos de los otros padres parecen tomarse el problema. Mi hijo se exaspera ante lo poco que parece importarles a sus compañeros todo el tema, como si no fuera con ellos. Tienen 14 años, tampoco podemos pedirles mucho en la sociedad en que vivimos..

De entre todo lo que hemos oido a nuestros vecinos me llama la atención una charla con la tendera que nos vende el pan en la urbanizaciñon. Nos indica para empezar indignada que estos temas no son propios de hablar con los chicos sino con los padres. No se si es porque piensa que son demasiado tontos e inmaduros para enterarse de cosas que afectan a su futuro, o si creen que los temas políticos son en general sucios e indignos para las mentes juveniles.

Recoge igualmente nuestra vecina en sus protestas los peores tópicos respecto a lo público y su intención de cambiar a su hijo a un colegio concertado. Que si los funcionarios no hacen bien su trabajo porque no les pueden despedir, que a su hijo le será más facil aprobar en un colegio privado (ha repetido curso) porque tienen más medios (o porque como le indica mi mujer, en un negocio al que paga se le trata bien). Es evidente que el camino de la destrucción de lo público pasa por alimentar estos discursos y estrangular los recursos empeorando su calidad.

Lo más triste de todo es que nuestra vecina no es una conservadora votante de Cospedal, sino candidata por el PSOE en las últimas elecciones municipales en nuestro pueblo. Con estas bases uno se explica mejor lo que nos ha deparado este partido en todos los años que van desde la transición.

Volviendo al tema de las movilizaciones de los profesores, es de destacar como se está produciendo un cambio en el modo de hacer las cosas. Los docentes en el instituto de mi hijo están teniendo cuidado de hacer a los padres partícipes y co-decisores en un problema que debe ser de todos. A su vez CCOO en Madrid se aviene a ampliar la convocatoria de huelga en Madrid al día 22 siguiendo exactamente lo acordado por las asambleas de profesores y frente a su decisión inicial. Desde el 15-M se está produciendo una cierta revolución en las formas de hacer política en que la participación de todos se impone a las decisiones de unos pocos. Un cambio de calado y que puede ayudarnos a avanzar despues de unas décadas de retrocesos en todos los frentes políticos y sociales.

viernes, septiembre 09, 2011

Porqué no saldremos de la crisis así (teoría económica básica)

Dice Alberto Garzón (citando a Joan Robinson) en su recomendable serie de artículos sobre teoría económica para principiantes Hay que estudiar economía, que el principal motivo para estudiar economía era precisamente para evitar ser engañados por los economistas. Me llamó la atención porque cuando en el año 84 me matriculé en Económicas lo hice precisamente con ese mismo objetivo y una vez que pragmáticos consejos me alejaran de mi vocación por la geología. Soy por tanto técnicamente economista, aunque no me considero como tal sino más bien un contable venido a más, pero desde entonces he tenido múltiples oportunidades de comprobar que me decisión fué correcta. Con la no demasiado profunda teoría económica aprendida me he visto protegido de los efectos de la propaganda económica oficial, y es que si uno tiene los más mínimos mimbres y algún ápice de capacidad crítica, se hacen absolutamente evidente las medio verdades, completas mentiras y pura propaganda con lo que al público indefenso se le alimenta por parte de teóricos científicos económicos.


Venga este largo preámbulo como anticipo de una (espero) breve argumentación del auténtico motivo de la crisis y porqué pese a lo que diga la propaganda oficial ni hemos salido aún de ella, ni vamos a salir en los próximos tiempos. Lo que viene a continuación es teoría económica para "dummies" que espero de un poco de luz a los más legos de entre mis ocasionales visitantes.


Si fueramos a simplificar un modelo de economía podríamos plantearnos un país con un trabajador y un empresario que le emplea en su empresa. Imaginemonos que la empresa produce 10 EUR en bienes y el trabajdor cobra 8 EUR, siendo el resto beneficio. Para que esta pequeña economía funcione es necesario que todo lo que se produzca por parte de la empresa se compre, por lo que no habría problema siempre que el empresario compre los 2 EUR restantes en productos con lo que ha ganado. Si no es así y el empresario o los trabajadores ahorran, se entraría en una espiral negativa, la empresa acumularía productos sin vender por lo que reduciría la producción y se pagaría menos al trabajador, que tendría menos dinero para comprar lo que generaría más acumulación de productos sin vender y así hasta el colapso. Es por eso que los economistas siempre consideran positivo el consumo, pero no siempre el ahorro.


El ahorro no es necesariamente malo siempre que se dedique a inversión. Si de lo que produce la empresa, una parte se consume en mejorar la fábrica, no sobraría nada y volveríamos al equilibrio. De hecho gracias a este ahorrro invertido se puede mejorar la producción y hacer por ejemplo que al año siguiente haya que trabajar menos para producir lo mismo. El empresario que no consuma sus 2 EUR y los dedique a invertir en su propia empresa podrá producir más y ganar más dinero el año siguiente. Sin embargo eso solo sucederá si tiene compradores para su creciente producción. En caso contrario no tendrá ningún interés en invertir y preferirá guardar lo ahorrado lo que nos llevaría a la espiral negativa indicada anteriormente. Nuestra economía es así como una bicicleta que no puede pararse. Los beneficios empresariales deben reinvertirse lo que aumenta la producción, lo que exige que aumente el consumo. Si el consumo no aumenta los beneficios de la inversión desaparecen y el empresario preferirá ahorrar lo que como ya mencionamos antes resulta catastrófico. 


Existe sin embargo otra salida. Volviendo a la situación inicial, el empresario puede no consumir los 2 EUR que gana y prestárselos al trabajador para que compre los productos de la empresa. El sistema vuelve a funcionar, pero solo en la medida en que el trabajador esté cada día más endeudado. Es inievitable que en un momento dado la deuda del trabajador sea ya tan grande que el empresario tema no ser capaz de cobrarla y deje de prestarle. El trabajador, no solo ya no tendría ese dinero extra prestado para consumir, sino que se le exige que devuelva lo que le prestaron con anterioridad, lo que disminuye más su capacidad de consumo y lleva a la economía al desastre. 


Ese, y no otro, es el origen de la crisis económica mundial que estalló en 2008. Con la llegada del neoliberalismo en los 80 se ha producido un enorme trasvase de ingresos de los trabajadores a los empresarios. Para que el sistema funcionara y el consumo no cayera, el volumen del crédito se ha tenido que multiplicar por casi 5 desde 1981(datos de EEUU descontando inflación), hasta alcanzar en 2008 al equivalente de 13 veces el volumen del PIB (más detalles aquí). Era solo cuestión de tiempo alcanzar el punto en el que se dudara de la capacidad de recuperar lo prestado, y cuando el crédito se paró, el sistema entró en barrena. No había que ser muy listo para saber que esto iba a ocurrir, pero aquellos economistas que lo anticipaban eran acallados ante los propagandistas del sistema.


La tozuda realidad puso al sistema ante la evidencia de sus debilidades. Sin embargo las soluciones que se tomaron respondieron a los intereses de quienes tenían el dinero y el poder de dirigir la economía. Dado que la gente no tenía dinero para consumir, se emplazó a los gobiernos a gastar, endeudándose lo necesario. Con ello se frenó la crisis momentaneamente a la espera de que una recuperada confianza hiciera que el crédito volviera a ponerse en marcha y recuperar la senda del crecimiento basado en el endeudamiento. Podía haber funcionado, pero en cualquier caso por un tiempo limitado, porque al final es evidente que hay un límite de deuda por encima de la cual esta resulta impagable.


En 2010, dos años despues del estallido de la crisis la economía siguía sin remontar pese a las inyecciones de inversión pública. Por el camino ya no somos solo los ciudadanos, sino que el estado se encuentra crecientemente endeudado, lo que añade un problema nuevo. A la crisis de deuda privada le acompaña ahora una crisis de deuda pública lo que nos colocó en una nueva encrucijada. La solución tomada respondió de nuevo a los intereses de quienes tienen el poder económico, obligando a los estados a reducir el gasto público para garantizar la devolución de lo prestado. Estrangular el gasto público es receta segura de contracción en una economía convaleciente, y dado que el consumo sigue estrangulado por el masivo nivel de endeudamiento privado, la vuelta a la recesión económica era segura. Es todo tristemente previsible, hasta un aficionado como yo anticipaba en este mismo blog hace dos años que esto iba a ocurrir (ver entrada La economía Ponzi), obviamente eran muchos más los que lo advertían pero como siempre eran silenciados.


¿Y ahora que va a pasar? En mi humilde opinión nos adentramos en unos meses económicamente negros. Me temo que los que detentan el poder económico no van a encontrar ninguna receta que nos saque del agujero y que a la vez les mantiengan su poder y sus beneficios. Como un parásito que se ha hecho demasiado grande, están matando a su anfitrión y deberán ponerse a dieta so pena de que todo se caiga con ellos dentro. Existen un par de recetas posibles, pero pasan por un cambio en la distribución de la riqueza y los ingresos y dudo que sean tomadas en consideración hasta que la presión social sea insoportable. Una de ellas pasaría por la reducción del crédito acumulado. Tal cosa puede lograrse indirectamente mediante un significativo aumento de inflación que disminuya el valor de la deuda en términos reales, a la vez que se mantiene unos tipos de interes bajos.  Justo lo contrario que el ferreo control de inflación que nos intentan imponer desde las instituciones europeas y especialmente el BCE. En España, dado que la deuda es mayormente hipotecaria, se podría reducir el endeudamiento con medidas como la dación en pago. En cualquier caso se produciría un trasvase de riqueza real hacia los trabajadores lo que les permitiría reactivar el consumo. Me temo que aún así estaremos condenados a repetir la crisis de forma cíclica en el futuro cuando el nivel de crédito vuelva a ser insoportable..


Otra vía sería la de llevar a cabo una importante reforma fiscal redistributiva Se aumentaría los impuestos a los que más tienen y se utilizaría ese dinero para mantener políticas de estímulo. Estamos hablando de medidas reales que contibuyan a un reparto de la renta más a favor de los trabajadores, y no de los retoques cosméticos que de vez en cuando se proponen. Esto se combinaría con políticas laborales que protejan los salarios.


De momento nada hace pensar que se vayan a tomar medidas de este tipo a corto plazo, pero el deterioro de la situación y la falta de otras respuestas hace que me parezcan inevitables, so pena de que el sistema capitalista se acabe viniendo abajo de forma relativamente inmediata. Supone el desmantelamiento del neoliberalismo y la vuelta a los principios socialdemócratas de antes de los 80. Existen dudas de que las medidas anteriores puedan llegar a evitar el fracaso del sistema a largo plazo. Hay quienes pensamos que el capitalismo es insostenible, pero eso daría para discusiones mucho más prolijas.

miércoles, septiembre 07, 2011

Cuando los sindicatos se convirtieron en un problema

Hoy hemos ido, una vez más, a manifestarnos por las calles de Madrid. Esta vez de la mano de la convocatoria de CCOO y UGT. Llegamos cinco minutos despues de la hora prevista para encontrarnos un grupo de gente sorprendentemente reducido que posteriormente fué creciendo sin que se pueda decir que haya sido una manifestación multitudinaria.

Estuvimos hace más de una semana en otra manifestación contra la reforma constitucional convocada espontaneamente y en pleno mes de Agosto y no me parece que la convocatoria arrastrara menos personas. De hecho uno tiene la impresión de que el hecho de que los convocantes sean nuestros afamados sindicatos resta más que suma, no solo no arrastran a nadie, sino que desaniman a muchos de los fieles que tradicionalmente asistimos a estas convocatorias. Yo mismo puedo confesar que no disfruto de la idea de apoyar un acto convocado por los mismos líderes sindicales que han firmado sin sonrojo alguno de los recortes sociales más duros de este nefasto último año de legislatura de Zapatero.

Hace un año yo estaba afiliado a CCOO y me aprestaba a participar activamente en una huelga general que hoy en día parece una burla. En solo un año, nuestros líderes sindicales han conseguido que los pocos recalcitrantes que aún esperábamos algo de nuestros sindicatos hayamos abandonado toda esperanza. El "crimen" ocurrió en Enero, si bien se gesto semanas antes. ¿En que estaban pensando Toxo y Mendez cuando se arrastraron ellos, los sindicatos que lideran y nos abandonaron a todos? Seguramente pensaban en hacer política y en que un mal acuerdo con el PSOE sería mejor que lo que en el futuro impusiera el PP. Que fuera la estupidez y la torpeza y no la maldad la causa del desastre no podrá nunca disculparles.

Desde el pasado mes de Enero algunos supimos que teníamos en los sindicatos un aliado menos y un enemigo más. Muchas cosas han pasado desde entonces, incluidos nuevos recortes y una reforma constitucional que entrona al neoliberalismo como ley inamovible. Más en el ámbito sindical, Agosto nos trajo también unas mini reforma laboral que añade más escarnio si cabe a humillaciones anteriores. Demasiado para que nuestros grandes sindicatos mantuvieran su silencio. Cuando levantaron la voz para convocar movilizaciones y nos recordaron que aún existían, tuve la sensación de que había conseguido olvidarme de ellos, como se olvida un mal recuerdo.

La manifestación de hoy debería servir para que algunos de las cúpulas sindicales se den cuenta del desastre que nos causaron. Su debilidad y falta de credibilidad es una derrota para todos nosotros, y me temo que tienen un enorme camino que recorrer hasta que puedan arreglar mínimamente el daño. Mientras tanto les agradecería que nos hagan un último favor y no se mezclen en ninguna iniciativa de las que la izquierda real proponga. Se les reconoce una posible buena voluntad, pero me temo que nos arrastran en su desprestigio.

domingo, septiembre 04, 2011

No corrais, no vamos a recortar los servicios sociales.

No se porqué, pero en los últimos tiempos oyendo a Cospedal hablar de su flamante "Plan de Garantía de los Servicios Sociales Básicos", me viene a la cabeza continuamente unas escenas de "Mars Attachs" de Tim Burton.

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Y Cospedal, tras aniquilar cualquier inversión en sanidad o educación, se pasea por los medios de comunicación declarando: "No corrais, votadnos, no os vamos a recortar los servicios sociales."

Si seré idiota que ya solo me dan ganas de partirme de risa.

jueves, agosto 25, 2011

PPSOE y su reforma constitucional

Mucho se puede decir de la famosa propuesta de reforma constitucional que Zapatero nos presentó y que el PP ha abrazado sin la fingida y mojigata aparente oposición que nos suele regalar cuando el PSOE presenta propuestas a su gusto.

Podemos hablar de como se intenta incluir en la Constitución un tipo de política económica tan ultraliberal que será considerado desfasado hasta para la propia derecha en muy poco tiempo.

Podemos hablar de los efectos contrarios a nuestro ya agonizante estado del bienestar.

Podemos hablar de como los gobernantes españoles se arrodillan mientras se bajan los pantalones ante lo que ordenan los líderes que mandan en Europa, arrastrandonos una vez más a todos en su imagen de servilismo.

Podemos hablar de como se aprovecha el verano para poner en marcha medidas de terrible alcance approvechando un cierto estado de somnoliencia social por parte de nuestros compatriotas.

Todo ello es grave, pero lo más sorprendente y quizás lo más terrible es como, despues de que las movilizaciones por parte de la gente en torno al 15-M pidiendo una democracia de verdad, los señores Zapatero y Rajoy demuestren que les importa todo una higa. Con todo su "papo" se ponen el mundo por montera y nos pasan por las narices que aquí España son ellos, y no nosotros, reformando la Carta Magna sin contar con nadie más como si fueran los dueños del país.

Estos tipos tienen mucha cara dura y bastante coraje. Nos pegan a todos una bofetada con vuelta y nos dicen a la cara que la gente no decide ni decidirá nada. Nos tratan como a niños que han tenido una rabieta a la que no se hace ningún caso.

Igual tengan razón, igual la gente es tan imbecil y sumisa como ellos piensan y traguen una vez más con el nepotismo del PPSOE. Pero igual no, y en este caso se están preparando un otoño electoral de lo más interesante.

viernes, agosto 19, 2011

Mi ciudad tomada por fanáticos religiosos

Ayer tocaba manifestación. Reconozco que para mi era como una catarsis, poder salir a la calle para oponerme a la forma en que la secta católica se inflitra en nuestra vida, en nuestra política, en nuestra sociedad, con la connivencia de nuestros políticos que acuden servilmente a besar la mano de su jefe máximo.

Para todos los que vivimos en Madrid, la ocupación que estos miles y miles de fanáticos católicos han hecho de la ciudad resulta cuando menos molesto. No es solo que nos corten las calles y que tengamos que ver como se hacen con la vía pública alardeando con sus banderas y sus camisetas oficiales. Entiendo que seguramente ellos no lo ven así, imbuidos en la seguridad que da su joven fanatismo no se dan cuenta que su religiosidad no es necesariamente compartida. A mi, aunque resulte anecdótico, me molesta especialmente que tengan que pagar menos que nosotros por las comidas o los transportes que nosotros disfrutamos o sufrimos durante todo el año.

Debe ser el verano, pero de momento hasta ayer me lo había tomado con bastante calma. Les veo en grupos, por todas partes y veo sobre todo a borregos y jovenes meapilas manipulados por una organización poderosa, con experiencia de dos mil años en el negocio. Siento más lástima que desprecio, ningún odio hacia su seguidismo y su espíritu grupal.

Por la tarde salgo a la manifestación con mi mujer. Mi hijo el mayor se queda cuidando a los pequeños, su fruttración ante no poder venir me enorgullece no por el tema en si, sino por como argumenta que no consiste en querer ir o no, que el prefiere estar jugando en el ordenador, pero que si todo el mundo decidiera no arrimar el hombro cuando hace falta no se conseguiría nada. Tiene solo 14 años y ya es más ciudadano que la inmensa mayoría. Prefiero que no vengan ninguno porque no las tengo todas conmigo al respecto de lo que va a pasar. Son muchos años como para no saber cuando puede haber follones.

Aparco en el parking de Montalban y cruzo con Julia por toda la zona de los peregrinos. Mi pin republicano y el otro con la estrella y las siglas de la URSS que llevo en la correa de la cartera están dados la vuelta. Mientra atravieso entre los sonrientes peregrinos considero que es casi mejor que sigan así, por si acaso. Amedrentado en mi propia ciudad entre banderas italianas, brasileñas, croatas... Bromeo con mi mujer, me siento como un humano en medio de una escena de "La invasión de los ultracuerpos".

Llego a Tirso de Molina y es como llegar a casa. Ambiente festivo, desde el 15 de Mayo las calles de Madrid son nuestras, y queremos expresarlo un poco ante la ola de fervor cristiano que nos espera. La manifestación no se mueve, es mucha gente y el recorrido es estrecho. Una hora despues de la fijada para su arranque decidimos callejear hacia Sol. Llegamos a Carretas y al fondo se ve la marea de peregrinos con sus banderas nacionales. Me sorprendo de la ineptitud de la policía y la delegación del gobierno. Carretas es estrecha y hay mucha gente, volvemos a callejear y llegamos a Sol por la carrera de San Jerónimo.

El espectáculo es triste y caótico. Los peregrinitos acuden desde la zona de Alcalá para increpar a la manifestación que está cortada. Nosotros estamos entre el bando que no queremos, hay movimiento policial. Decido salir de Sol y en Sevilla me encuentro con una parte de la manifestación que parece haber sido seccionada del resto que vuelve hacia Tirso de Molina. A su alrededor cientos de jovenes fanátiquillos increpándo y siguiendo a los manifestantes, solo unos pocos policías y la actitud pacífica de los manifestantes parecen evitar que la cosa vaya a mayores. El grupo manifestante pasa y se ve otro grupo de manifestantes aparentemente cortado que llaga de Sol por Alcalá. La actitud de los jóvenes católicos multinacionales resulta provocadora y anticipa problemas. Llegan furgones policiales con las sirenas, decido que ya es hora de marcharnos, es parte de mi acuerdo con mi mujer que no voy a meterla en líos.

Vuelvo hacia el coche mientras los católicos se arremolinan en torno a las iglesias de la calle Alcalá, debe ser hora de misa. Me viene inevitablemente a la cabeza las escenas de "Agora" de Amenabar. Tantos siglos y las mismas actitudes intolerantes de quienes piensan que profesan la fe verdadera. No son todos sin duda, pero el germen es intrínseco a cualquier religión o secta. Reconozco que siento un asco y un odio visceral hacia todo lo religioso, odio que el día de ayer solo contribuyó a fomentar.

Ya no puedo mirar a los pergrinitos con la misma mirada paciente y condescendiente del día anterior. Son fanáticos que han recorrido medio mundo para aclamar al lider de su secta, reclutados por profesionales del adoctrinamiento con técnicas de lavado de cerebro perfeccionadas durante siglos. Me indigna que no solo hayan ocupado mi ciudad, me hayan impedido circular y condicionen mi comportamiento. Ahora también pretenden impedirme mi derecho a expresar mis ideas. Me asquea anticipar como hoy se plegará la presidenta de la Comunidad, el Alcalde, el Rey y el Presidente del Gobierno ante este jefe sectario que presenta entre su nauseabundo curriculum su participación en las juventudes nazis. Y además nos toca en buena medida pagarlo de nuestro bolsillo añadiendo la burla a la ofensa.

Hoy leo con creciente indignación lo que ocurrió en la manifestación tras mi marcha. La actuación de la policía, las declaraciones de los políticos del PP y el silencio cómplice de los del PSOE. Mañana se ha convocado una manifestación de Atocha a Sol, allí estaré, seguramente esta vez no venga siquiera Julia. Anticipo que la cosa acabará mal, pero está en juego mi dignidad como ciudadano.

sábado, agosto 13, 2011

La Puerta del Sol como símbolo

Leyendo los Episodios Nacionales de Perez Galdós cuando era un chaval, quedé fascinado por el relato de la lucha entre la Guardia Real y las Milicias Nacionales que tuvo lugar el 7 de Julio de 1822. Son apenas un par de páginas que cuentan como unos batallones de tropas de élite son derrotadas por las milicias populares cuando las primeras se sublevan para revocar la constitución y devolver el poder absoluto al Rey. Es quizás tan solo una anécdota en nuestro tumultuoso siglo XIX, desconocida para casi todos, pero a la que yo le doy una enorme carga simbólica. Es, según creo, la primera vez que el pueblo en armas se enfrenta al ejército español en defensa del orden constitucional, en una especie de anticipo en miniatura de lo que mucho después fué nuestra guerra civil. Se combate en la Plaza Mayor y en la Puerta del Sol, y en esta ocasión las milicias se imponen.

No era la primera vez que la Puerta del Sol aparecía en la novela de Galdós ligada a acontecimientos históricos protagonizados por el pueblo de Madrid. Mucho más conocido es el levantamiento del 2 de Mayo de 1808 contra las tropas francesas que tiene en esta plaza su origen y epicentro y que Goya inmortalizará en su cuadro "La carga de los mamelucos". Fernandez de los Ríos define bien su importancia en la historia de España "No hay allí un palmo de terreno que no esté regado con la sangre de patriotas, de facciosos o de revolucionarios".

Es sin embargo más de un siglo despues cuando esa relación triangular entre el pueblo de Madrid, la historia de España y la Puerta del Sol alcanza quizás su momento álgido. El 14 de Abril de 1931 se alza allí la bandera republicana en el Palacio de la Gobernación y se proclama la Segunda República ante una multitud que la abarrota. La plaza se convierte en el centro de las celebraciones y protestas durante la república


Desde la caida del régimen de Franco, la Puerta del Sol se convirtió en un escenario habitual de manifestaciones de todo tipo. Su simbolismo, unido a que ya se encuentra cerrada al tráfico particular, y el hecho de ser un espacio intermedio que puede acoger cantidades importantes de gente sin requerir multitudes extremas para ser llenada, la convierten en un escenario perfecto. Seguramente por ello se decidió que acabara allí la manifestación convocada por DRY el 15-M. La acampada que la siguió, desalojada la madrugada siguiente por la policía, dió origen a lo que hoy conocemos como movimiento de los indignados del 15-M.

El gobierno cometió un serio error de cálculo cuando decidió desalojar a la gente que acampó aquella noche en la plaza. Debeieron de pensar que una vez más se podía obviar la protesta y retomar el orden habitual, y se encontraron que enfrente había un estado de hartazgo diferente. Por el camino convirtieron la Puerta del Sol y su acampada en el centro de un nuevo tipo de protesta. Repitieron su error el 1 de Agosto, y esta vez se demostró claramente que la carga simbólica que la plaza ha adquirido es demasiado grande como para que la gente permita que se la arrebaten. Una vez más el pueblo contra la autoridad, la Guardia Real convertida en Policia Nacional y en frente las protestas pacíficas en lugar de armas y cañones. El mismo resultado.

La Puerta del Sol es ahora mismo un símbolo de la protesta que es reconocido no solo en España, sino en el resto del mundo. La hemos adoptado como bandera y emblema de la causa, les va a ser muy complicado arrebatárnosla.


sábado, agosto 06, 2011

15-M, ciertamente no han entendido nada

Escucho en la SER un nuevo no-debate entre tertulianos al respecto del 15-M. se pasan la palabra y se dan la razón unos a otros en una fórmula repetida cada día y que condiciona el pensamiento de una inmensa mayoría de oyentes a los que se intenta conducir una vez más hacia el voto util y resignado al PSOE.

Un intento continuado de acabar con una movilización que no parecen entender. Alguien critica una vez más que eso es un ejército de Pancho Villa sin lideres y que así no puede ser. Otro se envalentona y repite aquello de que deben constituirse en partido como los demás, a ver si tienen apoyo en las urnas. Alguno vuelve a lo de que el movimiento perdió su legitimidad con los incidentes de Barcelona. Se retro-alimentan y se envalentonan en su acuerdo mutuo como una pandilla de adolescentes. Uno no sabe si reir o llorar ante su falta de comprensión, su descolocamiento y su ignorancia ante lo que pasa. Que un grupo de gente tan patético monopolice un momento de máxima audiencia de un programa de radio de la cadena lider en España no es casualidad. Los jefes del grupo mediático no eligen a los tertulianos al azar.

Desde otro ángulo observamos a la pobre delegada del gobierno en Madrid y sus torpes intentos de finiquitar la acampada de Sol. Me la imagino frotándose las manos esperando pacientemente al 1 de agosto, momento en que aprovechando que la gente solo piensa en las vacaciones, se podrá acabar con el incordio. Otra que no entiende nada (igual que sus jefes). Cuando se inician las movilizaciones deciden que la resistencia del movimiento será debil y apuestan por la firmeza. Las imágenes de la Puerta del Sol tomada por la policía y desalojada nos quedará para el album de los recuerdos. Lamentablemente si hay resistencia, y tras días de manifestaciones el Jueves se da una vuelta de tuerca recurriendo a la violencia policial. Ayer viernes habían perdido la batalla y desisten ante la evidencia de que la resistencia puede ir a más y no a menos, especialmente ante la llegad del fin de semana. Si no se cesa a la Delegada del Gobierno sospecho que será tan solo por la cercanía de las elecciones.

Todos estos mamporreros del sistema podrían entenderlo mejor si escucharan. Lo explicaba bastante claro un miembro de DRY esta semana cuando a preguntas de un periodista contestaba que ellos no representaban a nadie y por tanto no podían negociar en nombre de nadie. Ellos solo expresan su disconformidad y la gente voluntariamente se une a la protesta. Lo que está enfrente del sistema y sus defensores es simplemente la sociedad entera. Lo que el 15-M ha despertado es una dinámica de movilización y protesta que canaliza un enorme malestar, y el movimiento no va a desaparecer mientras el cabreo de la gente no desaparezca, mientras sigan desmantelando servicios sociales y el sistema se siga tornando más injusto y regresivo cada día.

Se presenta un otoño caliente. Las elecciones azuzarán el activismo de todo el mundo mientras la crisis económica no solo no se va, sino que sigue creciendo. Los intentos de contener la presión del descontento social y canalizarlo hacia la pura apatía han dejado de funcionar. La doctrina del shock que explica Naomi Klein consiste en aprovechar la crisis y el shock que trae para imponer medidas impopulares sin resistencia. La resistencia sin embargo ya ha surgido, y crece.

lunes, julio 25, 2011

La inevitable y odiosa pero tristemente necesaria y deseable victoria del PP

Que la victoria del PP en las futuras elecciones generales es inevitable lo sabemos todos. Que es una victoria que será odiosa por parte de un partido donde se enseñorea lo más rancio y parafascista de la sociedad española, tampoco creo que sea una afirmación que necesite mucha explicación. Quizás deba centrarme en explicar porque dicha victoria me parece a la vez necesaria y deseable.

¿Porqué necesaria? Porque lamentablemente 30 años de dogma neoliberal no va a desaparecer tan facil. Se nos ha vendido por parte ya no de la derecha, sino también de la supuesta izquierda, que nuestro bienestar estaba ligado a la creación de un sistema injusto a la medida de los poderosos. Epoca de mágicas paradojas, de bajada de impuestos que aumentarían la recaudación, de deslocalización de empleos que crearían trabajo, de empeoramiento de condiciones sociales que aumentarían nuestro bienestar. Y para mucha gente la doctrina de que beneficiendo a los poderosos nos beneficiábamos todos pareció funcionar, mientras España alcanzaba cotas de desempleo históricamente bajas que compensaban unos salarios congelados. Tiempos en que todos éramos especuladores inmobiliarios con nuestra propia vivienda.

Ahora, mientras la gente asiste al derrumbamiento del espejismo, toda la propaganda del sistema se alinea para intentar convencernos de que lo que falló no fue la receta neoliberal, sino que no se aplicó una dosis suficiente. Y buena parte de nuestros cociudadanos están dispuestos al sacrificio con la esperanza de que los dioses de la economía nos perdonen nuestras pretensiones de bienestar social, veleidades de las que abjuramos a cambio de que se nos conceda algo de empleo que nos permita al menos pagar la hipoteca a fin de mes. Indefensos muchos irán a regañadientes a las urnas a inmolarse a cambio de promesas de vuelta al paraiso de la burbuja.

Los populares ya hacen el cuento de la lechera. Mientras nos aprietan un poco más las tuercas, malo será que en el curso de su legislatura la economían mundial no empiece a remontar. Ya ocurrió en el 95 cuando tras la entrada en la moneda única la economía española cabalgó en la ola de un crédito inéditamente barato. Al calor de la recuperacion económica llegó entonces una posterior mayoría absoluta que solo pudo destruir la estupidez belicista del no menos estúpido Aznar. Si las circunstancias económicas se repitieran, la identificación del cruelmente liberal gobierno del PP con la remontada en lo económico quedaría marcada en el imaginario colectivo del votante medio asegurando largos años de preponderancia política.

Sin embargo, si tras las nuevas medidas de ajuste la crisis no remonta (y yo estoy convencido que no lo hará), el PP tendría que enfrentar un desgaste que podría desacreditarle y arrastrar a la imagen de cruel eficiencia que alguno pueda aún albergar del neoliberalismo. Una amarga pero me temo que necesaria medicina para purgar la intoxicación que el pensamiento único nos ha ocasionado en los últimos años y que sería un paso previo necesario para que mucha gente se replanteara los dogmas asumidos. Y una lección sin paliativos dado que el PP dominará todos los ámbitos de la administración.

Si triste es admitir el gobierno del PP como algo necesario, ¿que parte masoquista me hace considerar dicha victoria como deseable? Pues basta con tener en cuenta la alternativa. El PSOE se apresta una vez más a hacer el truco del trilero a los votantes más progresistas del país. En una reedición esperpéntica del lavado de cara del partido que encumbró a Zapatero, se nos presenta ahora a Rubalcaba como el príncipe azul que nos guiará de nuevo al paraiso socialdemócrata. Sin embargo resultaría desesperanzador si los españoles se dejaran embaucar ante una farsa que une a su zafiedad la falta de originalidad. Una derrota dulce del PSOE demostraría hasta qué punto la gente es incapaz de vencer el engaño del bipartidismo, y bloquearía la necesaria crisis en el partido nominalmente socialista. Una derrota sin paliativos del PSOE sería una indicación de que una masa crítica ha dejado de creer en el discurso bipartidista y nos prepararía para trabajar durante los cuatro largos años que nos esperan de dominio absoluto e ilimitado del PP.

Nuestra sociedad está política y socialmente enferma, y la cura no va a ser facil. Apuremos de una y cuanto antes esta dolorosa cura de desintoxicación y preparémonos para los años venideros que ofrecen perspectivas mucho más esperanzadoras.